La historia de la escalada en los mallos pequeños y macizo de los Fils se inicia justo un año después de la importante conquista del Pisón. Francisco Peiré, quien precisamente fue uno de los conquistadores del Pisón y que en esas mismas fechas había abierto la vía que lleva su nombre a la cima del Firé, participa también junto a Á. Serón y T. Sami en la conquista de la cima de la Peña Don Justo el 3 de abril de 1947. Con esa escalada, comienza una frenética actividad de "primeras" en los mallos pequeños, macizo de los Fils y mallos de Agüero, cuyas conquistas son casi sincrónicas; de hecho, el mismo Serón, junto a Millán y Lagüens es quien 10 días después de lograr la Peña Don Justo consigue la Peña Sola de Agüero.
No hay que esperar mucho para registrar otra "primera" en ese mismo año de 1947. El 3 de mayo un nutrido grupo de escaladores del Frente de Juventudes consigue escalar el pequeño mallo Chichín, en apenas un largo de cuerda; con esa modesta conquista que los ascensionistas declaran "magnífica para principiantes" se logra la primera cima de los mallos pequeños, seguida tres semanas después por la escalada más clásica y repetida de los mallos chicos: la Normal de la Aguja Roja.
Por lo curioso que es el texto en cuestión de toponimia, me gustaría transcribir íntegro lo escrito por Francisco Fau en aquellos días. Los tachados son también transcripción exacta del texto original:
"Día 1º de junio. Salimos hacia la cueva Carasol con el fin de escalar el "Pimiento" creyendo que entre la punta de la izquierda (a la que hemos bautizado con el nombre de "Hijo") existía un puente como el que hay entre el "Pimiento" y la "
(...) Día 4 de junio. Nos dirigimos otra vez a la "
Iniciamos la escalada a las 10'30 coronando la cima a la 1 sin más incidentes que el haber caído los martillos y el buzón al llegar a una especie de chimenea que hay cerca de la cima. Después de hacer un colosal buzón de piedras y poner una bandera con la camiseta de Serón y [ilegible] el papel de las firmas en mi pañuelo y en una
Antiguos nombres del Gómez Laguna y la Aguja Roja |
Como otro documento histórico más, el 14 de octubre de 1951 un joven Alberto Rabadá registra con su firma su primera escalada en Riglos, la que supone ser la 6ª ascensión de la Aguja Roja en el libro de piadas, aprovechando dicha ascensión para dejar el buzón de registro que no pudieron dejar los primeros ascensionistas, aunque dos años después Fernando Cantero y Antonio Virgili avisan que no han encontrado dicho buzón. No me resisto tampoco a enlazar el post que publicó Gregorio Villarig sobre su primera ascensión a la Aguja Roja en la que no pusieron ni un solo clavo. Por cierto, es curioso que al igual que los aperturistas, también tuvieron problemas con sus martillos en la escalada.
La escalada a la Aguja Roja, originalmente se realizaba subiendo al puente de roca por el diedro-chimenea oeste, mucho más fácil, aunque más largo y hoy en día prácticamente desequipado. La Normal de la Aguja Roja se ha convertido en una gran clásica de iniciación a la escalada riglera, ideal como primera toma de contacto con los bolos.
Ficha técnica:
Aproximación: desde el parking de los mallos pequeños, junto a la balsa, tomar el camino de San Román (GR-1) que se dirige hacia el macizo de los Fils. La pista en buen estado no tiene permitido el tránsito de vehículos a partir de la balsa.
Cuando estemos situados a la altura entre el mallo Cored y la Aguja Roja, estaremos atentos a un sendero que parte hacia arriba y suele estar indicado con un hito de piedras. Desde ahí, y con precaución de no desviarnos hacia el Cored, rodeamos por la izquierda (oeste) la Aguja Roja y nos internamos por la canal que separa la Aguja Roja del Gómez Laguna, pasando por debajo del puente de roca que une ambos. En el rellano que forma el collado entre ambos mallos, comienza la escalada.
Largo 1: Por el diedro formado entre la pared del Gómez Laguna y el puente de roca, ascender aprovechando alternativamente ambas paredes o la fisura entre las dos hasta situarnos encima del puente de roca. Pasos algo atléticos que nos pueden coger en frío si no se está muy acostumbrado a esta escalada. Cruzar el puente de roca y en la pared de la Aguja Roja, encontramos la reunión. V, 20 metros.
Rápel en la Aguja Roja |
Largo 3: Se trata de seguir hasta el final el claro diedro que domina la reunión. Reunión intermedia de rápel que no hay que montar. Seguir hasta la cima de la entosta que forma el diedro. Reunión en sirga. IV+, 35 metros.
Largo 4: Fácil por terreno evidente y tumbado hasta la cima. Reunión en sirga. IV, 20 metros.
Descenso:
Por la Vía Normal, montando el rápel en todas las reuniones excepto en la primera que se hace en el puente de roca, que no es obligatoria ya que en 35 metros se llega al suelo desde la segunda reunión.
Muchas veces he mirado desde la Aguja Roja este mallo. Nunca me he metido por no saber nada de él.
ResponderEliminarUn día de estos iré con tu reseña.
Mil gracias.
OK, supongo que el comentario querrías haberlo escrito en la entrada del Gómez Laguna. :-D
ResponderEliminarYo tampoco tenía manera de encontrar nada y a los que pregunté me solían dar información bastante difusa, así que me lancé a la aventura. En la Normal fuimos encontrando parabolts que no esperábamos por ahí y que no sé quién pondría, pero también tienes algún tramo para ir "navegando" por ahí.
En general, me pareció bastante mejor de lo que me habían contado, aunque ni la Normal ni la Directa del 74 son unas vías para tirar cohetes.
Ante cualquier cuestión que te surja, no dudes en preguntarme.
Salud!
VEO INTERESANTE TU BLOG. LO INCLUYO EN LOS ENLACES DE MI BLOG www.luisfernan57.blogspot.com
ResponderEliminarSALUDOS
Saludos, Elales:
ResponderEliminarVeo que en tu reseña marcas la vía Vallés- VIllarig de la Aguja Roja. Un día hablando con Villarig me contó como la habían abierto y que, según recordaba, solo dejaron un clavo. Cuando escalé la Exocet ví su clavo a la izquierda de la entosta y supongo que la vía entrará desde el suelo y subirá por la izquierda de la normal, pero no he logrado encontrar ninguna reseña.
¿La tienes tú?¿me la podrías enviar?. Mil gracias.
Javier Plaza
jabierplaza@yahoo.es
Hola, Javier:
ResponderEliminarLa única reseña que conozco de la Vallés-Villarig es la que aparece en la guía de Montaner y Orús. Si quieres, te la puedo pasar o puedes hacer la consulta en la página de Evaragón, que Vallés suele estar por ahí y te podrá indicar mejor.
Los únicos vestigios que he encontrado de la vía es el clavo que comentas y un buril que hay a la derecha de la primera reunión de la Exocet.
Salud!
Muchas gracias por la respuesta, no tengo la guía de Montaner-Orús pero ya la pediré que algún amigo la tendrá.
ResponderEliminarPor cierto, hay otra vía nueva entre la Sonia y la Edil (Ayer estuve en la Aguja Roja y ví los primeros parabolts, no sé si estará acabada), parece que se les multiplica el trabajo a los que están trabajando en las guías de Riglos.
Un abrazo
Muchas gracias, no tengo la guía de Montaner y Orús pero la pediré que algún amigo la tendrá.
ResponderEliminarMil gracias
En primavera de 1984, el malogrado Jose Luís García Arranz y estuvimos en Riglos impartiendo clases de escalada a los oficiales y suboficiales del curso de montaña de la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales. Nosotros hacíamos la mili en Candanchú y Pedro Espósito nos llevó con su gente a ayudarles en la formación. Una tarde, una vez finalizadas las clases, nos escapamos de la zona de acampada con una cuerda, 2 arneses y dos descendedores. Nos encaminamos a la Aguja Roja y subimos su ruta normal "a pelo" (la cuerda únicamente para los rappel).
ResponderEliminarUna experiencia maravillosa: atardecer, un buen amigo, una buena vía, una cierta dosis de riesgo ... Si los militares nos llegan a pillar, nos encierran en el calabozo una buena temporada.
José Luís nos dejó años más tarde en el hielo de Gavarnie. Pero vive para siempre en nuestro recuerdo.